Descripción
Bandera de Aguarón disponible en tejido Poliéster 100%, microperforado, de varias medidas desde 015×025 cm a 150×300 cm y de alta calidad. Especialmente indicada para utilización exterior.
Si no encuentra la bandera que busca en nuestro catálogo, háganoslo saber y se la intentaremos encontrar. También se pueden personalizar las banderas existentes, o bien enviar diseños propios. Consúltenos presupuesto.

* El diseño definitivo puede diferir ligeramente del mostrado en la imagen. Las banderas se suministran sin mástil.
Banderas de Aguarón
Aguarón
Ayuntamiento de España
Bandera
Aguarón
Localización de Aguarón en España.
Aguarón
Localización de Aguarón en la provincia de Zaragoza.
País España
• Com. autónoma Aragón
• Provincia Zaragoza
• Región Campo de Cariñena
• Partido judicial Daroca
Localización 41°20?20?N 1°16?11?OCoordenadas: 41°20?20?N 1°16?11?O
• Altitud seiscientos cuarenta y nueve msnm
Superficie treinta y seis con sesenta y dos km²
Población setecientos veinticuatro hab. (dos mil quince)
• Densidad veintiuno con setenta y cuatro hab./km²
Gentilicio Aguaronero, ra
Regidor (dos mil once) Lucio Cucalón Bernal (Partido Socialista Obrero Español)
Aguarón es un ayuntamiento de España, en el Campo de Cariñena, provincia de Zaragoza, Aragón. Muestra como fondo el paisaje de la Sierra de Algairén.
Política local
Últimos alcaldes de Aguarón
Periodo Regidor Partido
mil novecientos setenta y nueve-mil novecientos ochenta y tres Ángel Gimeno Sancho UCD
mil novecientos ochenta y tres-mil novecientos ochenta y siete
mil novecientos ochenta y siete-mil novecientos noventa y uno Lucio Cucalón Bernal Partido Socialista Obrero Español
mil novecientos noventa y uno-mil novecientos noventa y cinco
mil novecientos noventa y cinco-mil novecientos noventa y nueve
mil novecientos noventa y nueve-dos mil tres
dos mil tres-dos mil siete
dos mil siete-dos mil once
dos mil once-dos mil quince
dos mil quince-dos mil diecinueve
Resultados electorales
Elecciones municipales
Partido dos mil tres dos mil siete dos mil once dos mil quince
Partido Socialista Obrero Español seis cinco cinco cuatro
Partido Popular 1 1 1 dos
CHA 1 1 1
PAR – –
Total siete siete siete siete
Monumentos
Iglesia de San Miguel Arcángel, obra barroca del siglo XVIII con 2 torres de 4 cuerpos enmarcando la testera. Conserva los retablos de los siglos XVI al XVIII, tallas del siglo XVI, como un monumental órgano.
Municipio, del siglo XVIII, con un porche con 3 arcos de medio punto.
Personajes ilustres
Simón Tapia Llenan (mil novecientos seis-mil novecientos noventa y tres): Académico de la Nacional de Historia, miembro activo del Instituto Mexicano de Ciencias y Humanidades, autor de más de doscientos obras, tuvo un extenso reconocimiento mundial. Murió en la urbe de México a los ochenta y seis años de edad.
Lino Rodrigo Ruesca (mil ochocientos ochenta y cinco-mil novecientos setenta y tres): Prelados de Granada y de Huesca.
Luis Marín Bosqued: Académico de número de la Real Academia de Nobles y Hermosas Artes de San Luis. En mil novecientos ochenta y cuatro recibió el título de Hijo Adoptivo de la urbe de Zaragoza. Un par de años después, consiguió la medalla de plata de la Sociedad Académica de Ciencias, Artes y Letras de la ciudad de París.
Pascual Perez Perez: Catédratico de Quimica-Física en la Universidad de Zaragoza.
Festividades
La Celebración de Los Quintos
El día de San Blas (tres de febrero) se festeja la celebración de quintos que tiene su origen en la celebración del sorteo para ir a la mili. Los quintos se ponían en el balcón del municipio, el secretario leía a viva voz la papeleta con el nombre del quinto y el número que le había tocado. El quinto que sacaba el número más alto, se libraba del servicio militar, y los que sacaban los números más bajos iban fuera de la península.
Es una de las tradiciones más bonitas de Aguarón, no solamente se ha preservado, sino se ha popularizado siendo todos los años un éxito en participación.
Ya no se distingue entre hombres y mujeres, «los quintos» se visten con ropas tradicionales con sombrero de fieltro y encalla recta con abrazadera de cuero o bien piel y cintas de colores. Se apareja una burra con albarda, serón de esparto y arreos refulgentes. En el centro y a lo alto de la albarda, en un panel ponen un roscón grande que dice: Viva la Quinta del Año xx.
Antigüamente era una celebración donde los quintos recorrían la localidad pidiendo comestibles (pollos, embutidos, tortas, vino, etcétera). Empezaba al salir de la iglesia tras la bendición de los «rollos»; la comitiva recorría la urbe cantando coplas y en las casas de los quintos se ofrecía a los acompañantes pastas y vino. Más tarde las madres de los quintos con el alimento recogida efectuaban una comida para los quintos y sus familias. El alimento se festejaba en general en «El Santurrón» y al quinto que se libraba lo anudaban a una de las puertas de forja y lo dejaban sin comer.
Hoy en día han variado ciertas cosas: los quintos ya no llenan el serón de comestibles, si bien se ha mantenido la tradición del borrico, tras salir de misa primero se marcha al Municipio, entonces a las tiendas y establecimientos de la localidad, después en la casa de cada quinto se ofrece chocolate, moscatel, pastas y, conforme avanza la mañana, todo género de tapas y temtempiés fríos y calientes (eso sí acompañadas de un genial vino de Aguarón). Las familias de los quintos se esmeran en obsequiar a los vecinos y visitantes.
Se conserva la tradición del sombrero, y los quintos lucen bonitos pañuelos al cuello y van con su encalla vestida con cintas de colores vistosísimas. Asimismo se adorna una burra como en el pasado, si bien el serón de esparto lo llevan por preservar la tradición; hoy día ya no se obsequian comestibles, sino más bien dinero. En el centro y a lo alto de la albarda, en un panel ponen un roscón grande que dice: Viva la Quinta del Año. Una vez terminada la ronda por las casas de los quintos, los bares y las tiendas, todos y cada uno de los quintos y sus familiares van juntos a comer al pabellón.
Tiro de Barra Aragonesa
El Club de Barra Aragonesa de Aguarón nace en el año dos mil nueve merced a la ilusión y el entusiasmo de un conjunto de amigos que deciden arrancar este ambicioso proyecto, al objeto de promover entre nuestra juventud los deportes tradicionales aragoneses y de forma especial el Tiro de Barra. Si bien este movimiento nace en Aguarón, asimismo tenemos apoyos de compañeros y amigos de otros pueblos de la región interesados en estos deportes tradicionales y que hasta este instante no han tenido ocasión de asociarse en un Club para adiestrar, compartir y competir en los campeonatos organizados por la Federación.
El tiro de barra puede tener orígenes romanos, en concreto en los instrumentos gimnásticos llamados «Vectis» (palanca de hierro terminada en cuña) y «Lingulata» (efectuado en madera dura). En contraste a otros juegos tradicionales, el lanzamiento de barra ha continuado inmutable transcurrido el tiempo, conforme se desprende de los abundantes datos que se han preservado hasta el día de hoy.
En Aragón el tiro de barra procede de las labores del campo, donde se llamaba asimismo tiro de reja, puesto que esta era parte del arado de donde se sacaban las barras.
El tiro de barra se practica en prácticamente todas las regiones aragonesas desde la antigüedad. La tradición oral ha trasmitido que cara mil cuatrocientos cincuenta en el pueblo de Argavieso (Huesca) tuvo sitio una enorme competición. Este pueblo estaba poblado de moros, vasallos del caballero cristiano Juan de Gurrea, a cuyo servicio estaba el morisco Mahoma Osen, tan buen capataz como tirador de barra. Este tenía un enorme contendiente, un tal Pitarque de Blasco, de profesión “zabacequia” o bien guarda de las acequias. Se organizó una tirada a “diez tandas de 5 tiros” y los vecinos se organizaron en 2 bandos. Los moros apostaron por Mahoma Osen y los cristianos por Pitarque de Blasco.
La apuesta era de veinte salarios jaqueses y una comida general. El notario debía dar fe del resultado, cobrando diez florines de oro. Los cuidadores del moro pusieron a su predisposición patas de pollo y leche de cabra. Pitarque y los suyos prefirieron velar armas con el vino viejo de La Sarda, sitio del camino entre Argavieso y Fañanás, donde tuvo sitio la tirada. No se sabe el resultado de la apuesta. Calatorao, de exactamente la misma forma que este pueblo de Huesca, estaba poblado de moros y cristianos, dominando en número de habitantes los primeros, de forma que este relato es un claro ejemplo de lo que acá pudo pasar.
La Barra – Medidas – Pesos
El material que se utiliza en nuestros días para las competiciones es una barra de hierro de forma cónica, con la boca en forma de bisel, de ochenta y uno centímetros de largo, tres cm de diámetro y siete,257 kilogramos de peso. Además de esto es precisa una tabla de madera de 10×10 cm y dos metros de longitud para marcar el comienzo del campo de tiro, y un contrapeso de quinientos gramos hasta uno con cinco kilogramos para facilitar el giro y asistir al tirador a sostener el equilibrio.
El campo de tiro
El campo de tiro se sitúa al aire libre y en terreno plano. Tiene forma leño-cónica, con una base recta donde se ubica el tirador y un frente arqueado. Se debe marcar un campo de tiro y un corredor de seguridad. El campo de tiro tiene cincuenta metros de largo y ocho de amplitud máxima, y está subdividido en 4 partes que, desde el punto de tirada, tienen cinco, diez, quince y veinte metros de longitud, respectivamente. El corredor de seguridad prosigue la manera cónica del campo y representa una prolongación de cuatro metros de amplitud máxima cara la parte frontal del mismo.
De qué forma se efectúan las tiradas
El lanzador va a coger la barra por su punto medio, haciendo coincidir el dedo índice con el punto medio de exactamente la misma. Se ubicará delante de la tabla de madera y la punta de la barra va a ir a tocar el contrapeso haciendo virar el cuerpo. Seguidamente se lanzará la barra lo más lejos posible, que entonces tiene que caer vertical o bien inclinada y pegar en el suelo con el extremo grueso de la barra, sin haber girado en el aire. Se compite a ocho tiros y el ganador va a ser el que alcance la mayor distancia posible. En las tiradas hay 2 jueces, uno que controla que el lanzador no separe los pies de la tabla, y el otro cuyo encargo esto es en qué momento cae la barra, si el tiro es nulo o bien válido.